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Conserva las dosis de insulina con Cartera FRÍO

Las carteras Frío o carteras de Frío son el método más fácil y simple, recomendado por los profesionales, para llevar la insulina durante varios días y proteger las dosis durante las épocas más cálidas del año.

Catálogo de Carteras Frío

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Las carteras Frío o carteras de Frío son el método más fácil y simple, recomendado por los profesionales, para llevar la insulina durante varios días y proteger las dosis durante las épocas más cálidas del año.

Si te preguntas donde puedes comprar una cartera frío para insulina, aquí tienes una selección de los mejores modelos de esta marca de estuches frío para medicamentos que puedes adquirir a través de Amazon.

Ventajas de utilizar una cartera Frío

La principal ventaja de esta nevera para insulina portátil es la facilidad con la que se vuelve a activar el gel térmico.

  • Olvídate de neveras para enfriar placas
  • Olvídate  enchufes para recargar ningún dispositivo
  • Comodidad y autonomía para llevar a cualquier parte

Con otros modelos, cada cierto tiempo tienes que congelar o refrigerar las bolsas de gel para seguir enfriando. En muchas ocasiones, sobre todo cuando se viaja, el paciente de diabetes no siempre tiene cerca estos dispositivos.

Por este motivo, los estuches para insulina de Frio, te ofrecen una gran libertad, solo con agua recuperarás la capacidad de enfriamiento de forma que la puedes reutilizar una y otra vez

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Conserva las dosis de insulina y mucho más

Estos estuches son ideales para transportar los bolígrafos o plumas de insulina. Pero también son aptos para transportar viales, cartuchos de recambio e incluso otro tipo de medicación que necesita mantenerse a baja temperatura como gotas oculares, hormonas de crecimiento o dosis de epinefrina para casos graves de alergias.

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Cómo funciona la Cartera Frío

Empezar a utilizar la cartera FRÍO para insulina es muy fácil, tan sólo es necesario sumergir la funda interior en agua durante unos cinco minutos. Entonces, los cristales del interior absorben el líquido y se expande hasta transformarse en un gel frío que consigue mantener la temperatura estable hasta 45 horas a una temperatura entre 18 y 26º. Incluso durante los días más calurosos del verano.

Una vez la bolsa interior está preparada, se puede secar con una toalla y guardar dentro de la funda exterior para transportar cómodamente hasta que sea necesario su uso.

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Pero esto no es todo

Pasadas las 45 horas o una vez haya perdido la temperatura adecuada, para volver a activar la Cartera Frío, tan solo hay que volver a introducir la funda interior en agua otros cinco minutos y volver a disponer de dos días más.